Cómo montar en bici bajo la lluvia: 15 consejos esenciales

1. Invierte en una chaqueta impermeable de calidad

Una chaqueta impermeable para ciclismo es clave para mantenerte seco y cómodo. Elige una que sea ligera y transpirable, con paneles de ventilación o cremalleras que eviten el sobrecalentamiento. Los modelos con faldón trasero protegen la zona lumbar de las salpicaduras, y los detalles reflectantes mejoran la visibilidad en condiciones de poca luz.

2. Usa calzado impermeable o cubrezapatillas

Llevar los pies secos es fundamental para el confort y el rendimiento. Apuesta por zapatillas de ciclismo impermeables o usa cubrezapatillas de neopreno o silicona como barrera. En caso de apuro, una bolsa de plástico sobre los calcetines puede ser una solución temporal.

3. Lleva una gorra de ciclismo plegable

Una gorra plegable bajo el casco es un accesorio pequeño pero eficaz en días de lluvia. Su visera corta protege la cara de salpicaduras. Al ser plegable, puedes guardarla fácilmente cuando deje de llover.

4. Utiliza un gorro bajo el casco para más abrigo y confort

Ofrece una capa adicional contra el frío y la humedad. También evita que el agua te caiga en los ojos y absorbe el sudor, mejorando el confort general. Busca tejidos que evacúen la humedad y se sequen rápido.

5. Protege el cuello con una braga de cuello

Una braga de cuello es de lo más versátil: mantiene el cuello caliente, bloquea viento y lluvia y se puede subir hasta cubrir la cara. El tejido elástico y transpirable evita que el agua se cuele por el cuello del abrigo.

6. Usa manguitos para una protección extra

Los manguitos permiten añadir o quitar capas según el clima. Proporcionan calor y cierta resistencia al agua. Opta por versiones hidrorrepelentes que mantengan la transpirabilidad.

7. Revisa los neumáticos y ajusta la presión

Reducir ligeramente la presión de los neumáticos mejora el agarre en superficies mojadas, ayudando a evitar deslizamientos. También es recomendable usar cubiertas más anchas con dibujo, ya que evacúan mejor el agua y ofrecen mayor tracción.

8. Prueba los frenos para asegurar la potencia de frenado

La lluvia disminuye la eficacia de los frenos, así que conviene revisarlos antes de rodar. Los frenos de llanta tardan más en responder en mojado, así que anticípate. Si llevas frenos de disco, funcionan mejor, pero igualmente exigen precaución. Considera usar zapatas o pastillas específicas para lluvia.

9. Mejora la visibilidad con luces y elementos reflectantes

La lluvia y el cielo nublado dificultan que te vean. Usa luces delantera y trasera (impermeables y recargables por USB, si es posible), incluso de día. La ropa o accesorios reflectantes también son clave para que se te vea bien.

10. Instala guardabarros para mantenerte más limpio y seco

Los guardabarros evitan que el agua del suelo empape tu ropa y tu bici. Los de tamaño completo ofrecen mayor protección en trayectos largos. Las versiones de clip son una solución rápida si tu bici no tiene soportes. También ayudan a mantener la transmisión más limpia, reduciendo el mantenimiento.

11. Evita charcos y superficies resbaladizas

Los charcos pueden ocultar baches, cristales u otros objetos que representen un peligro. Siempre que puedas, esquívalos y mantén un ritmo controlado. Las marcas viales, rejillas metálicas o las hojas mojadas se vuelven muy resbaladizas: extrema la precaución al pasar por encima. 

12. Mantén la calma y adapta tu forma de rodar

Rodar bajo la lluvia ayuda a ganar confianza y destreza con el tiempo. Modera la velocidad, evita giros bruscos y frena de forma progresiva para mantener el control. Si te pilla un chaparrón, busca un ritmo seguro que te permita rodar con comodidad y estar atento al terreno.

13. Limpia tu bicicleta después de rodar

El agua de lluvia mezclada con tierra y suciedad de la carretera puede causar rápidamente corrosión y desgaste en tu bicicleta. Tan pronto como termines tu salida, seca el cuadro, las ruedas y la transmisión con un paño seco. Un enjuague rápido también ayuda a prevenir daños a largo plazo, especialmente si has pedaleado por caminos con barro.  

14. Lubrica la cadena para evitar la oxidación

Rodar con lluvia elimina la lubricación de la cadena, dejándola vulnerable al óxido. Después de limpiar la bici, aplica un lubricante específico para clima húmedo, ya que está diseñado para durar más en condiciones mojadas. Evita lubricar en exceso, ya que el aceite sobrante atrae suciedad y mugre.

15. Entra en calor y cámbiate a ropa seca

Después de un paseo bajo la lluvia, tu temperatura corporal puede bajar rápidamente. Toma una ducha caliente para evitar enfriarte y cámbiate de ropa lo antes posible. Si se te mojaron los zapatos, rellénalos con papel de periódico para absorber la humedad y acelerar el secado.

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